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Aire Acondicionado | Mantener limpios los filtros de tu aire acondicionado, es clave para un óptimo funcionamiento del aparato, y también para cuidar tu salud.

¿Cómo limpiar el filtro de tu aire acondicionado?

Es muy importante cuidar tu aire acondicionado para optimizar el consumo y que funcione correctamente. Los filtros están fabricados normalmente de nylon y son la primera barrera protectora de los equipos de aire acondicionado. Es muy común que con el paso del tiempo, las partículas en suspensión del aire se acumulen en los filtros, así que la limpieza es necesaria para mejorar la calidad del aire.

Para limpiar los filtros en un aparato de aire acondicionado split, la tarea es sencilla. En primer lugar, tienes que desmontar los filtros tal y como indican las instrucciones de tu aire acondicionado, y enjuagarlos con agua templada. 

Puedes frotarlos ligeramente con las manos para desprender la suciedad más resistente, utilizar un jabón blando e incluso utilizar un cepillo suave. Lo que nunca debes utilizar son productos abrasivos porque se podrían estropear, ni tampoco un cepillo de cerdas duras que podría producir agujeros. Una vez limpios, déjalos secar al aire hasta que estén totalmente secos y seguidamente colócalos de nuevo en el aire acondicionado.

Si no sabes dónde están ubicados los filtros, basta con levantar con cuidado la parte frontal del split para localizarlos. 

En el caso de los filtros del aire acondicionado por conductos están ubicados en la parte trasera de la unidad. Para desmontar estos filtros deberemos levantar una parte del techo y desmontarlo de la unidad. La limpieza se realiza de la misma manera que en los filtros de aire acondicionado split.

Algunas unidades de aire acondicionado por conductos, disponen de unos filtros que no están fabricados en nylon y  por lo tanto no son lavables. En este caso, la única medida posible es la sustitución por filtros nuevos.  Lo cierto es que muy rara vez es necesario limpiar los conductos de un aire acondicionado doméstico ya que están fabricados con doble lámina de aluminio en la parte interna y externa, por lo que es difícil que se ensucien.

Tu televisión | Encuentra el televisor que mejor se adapte a tus necesidades

Un televisor es un producto caro y difícil de reemplazar si nos damos cuenta de que sus funcionalidades no son las que necesitamos. En nuestra guía de compra te contamos cuáles son los aspectos básicos que debes tener en cuenta al elegir

Cómo elegir el tamaño ideal
Dejando a un lado los problemas de mobiliario y obstáculos físicos, el primer criterio en el que fijarse a la hora de elegir un televisor es el tamaño de la pantalla. En España, los dos tamaños más vendidos son los de 32” y 43”. El número de pulgadas indica la longitud de la diagonal de la pantalla: una 1” (pulgada) equivale a 2.54cm. Así, un televisor de 32” tiene una diagonal de pantalla de 81 cm y uno de 60”, de algo más de metro y medio.
Las pantallas exigen una distancia mínima de visionado. Nuestra recomendación es que la separación entre su sofá y la tele sea en torno a tres veces la medida de la diagonal de pantalla. Pero, como en otras muchas cosas, la percepción es subjetiva. Por ejemplo, en el cine, que hay gente que prefiere las primeras filas y gente que prefiere las últimas.
También podrá reducir esta distancia si escoge televisores de gran resolución, que cuentan con mayor nivel de detalle. Así, una televisión 4K puede reducir a más de la mitad la distancia necesaria frente a uno Full-HD.

¿Qué tipo de pantalla es mejor?
Aunque el plasma supuso una revolución, poco a poco ha ido despareciendo y, hoy en día, es difícil encontrar en el mercado modelos con paneles de plasma. La gran mayoría de las televisiones llevan paneles LCD (Pantalla de Cristal Líquido). No se deje influir por la publicidad de los fabricantes (QLED, MicroLED, Nano Cell, etc.), pues no dejan de ser variantes de la tradicional tecnología LCD.
En cuanto a la tecnología OLED, sí supone una mejora radical en la calidad de imagen, eso sí acompañada de un aumento significativo en el precio del televisor. Estas pantallas, que utilizan un diodo para cada píxel, destacan por sus pocos reflejos, sus excelentes colores y por verse bien desde distintos ángulos.

Resolución de pantalla: Full HD, Ultra HD, 4K o 8K

Estos términos hacen referencia a la resolución de la pantalla, que es el número de píxeles que puede mostrar y que se expresa a través de la resolución horizontal (número de líneas verticales) y de la resolución vertical (número de líneas horizontales), separadas por “x”.
De esta manera, un televisor Full HD es un televisor con una resolución 1.920 x 1.080 (resolución horizontal x resolución vertical) y un televisor Ultra HD, una resolución 3.840 x 2.160 píxeles, también llamados 4K entre los fabricantes de televisores como argumento de ventas. Técnicamente, el término 4K se refiere a una resolución horizontal de 4.096 píxeles, establecida por Digital Cinema Initiatives (DCI), sin especificar la resolución vertical. Esta diferencia casi inapreciable (3.840 frente a 4.096) ha hecho que el término 4K se popularice.
La inexactitud se repite también en el formato 8K Ultra HD (7.680 x 4.320), que tiene el doble de píxeles horizontales que los 4K, pero sin llegar a los 8.192 píxeles definidos por DCI.

¿Qué me ofrece una tele con Smart TV?
La forma de ver la televisión ha cambiado en los últimos años, y todo gracias a internet. Ya no nos conformamos con ver lo que los canales tradicionales nos quieran ofrecer y cuando ellos decidan, sino que queremos ver lo que nos apetece y de forma inmediata. De ahí, el éxito de la Smart TV, la televisión conectada a internet.

La Smart TV nos da acceso a una gran cantidad de contenidos que no nos proporcionan los canales tradicionales. Aparte de la TV a la carta, los contenidos audiovisuales más demandados son las películas y las series extranjeras, la música y la radio on line.
La disponibilidad de aplicaciones depende de los acuerdos de cada una de las marcas con los distintos proveedores de contenidos. Por eso, aunque en todos los modelos hay ciertas aplicaciones básicas como, por ejemplo, YouTube, Facebook, Flickr, Twitter, nuestro consejo es que consultes las páginas web de cada marca y compruebes el catálogo disponible.

Conexiones del panel de trasero de un televisor
Para conectar tu Smart TV a internet puedes usar un cable que conecte el router y el televisor. Pero, si no tienes instalado un aparato al lado del otro, valora si te interesa un televisor con conexión wifi. También debes comprobar, si está integrado en el televisor, porque algunos modelos necesitan un adaptador (que no está incluido en el precio del televisor) que se conecta a uno de los puertos USB.
La compatibilidad con Wifi Direct hace posible crear un enlace directo entre dispositivos punto a punto, es decir, sin pasar por el router. Para ello, tanto el televisor como el otro dispositivo (smartphone, tableta…) deben ser compatibles con Wifi Direct.
Respecto a las conexiones HDMI para poder conectar consolas de videojuegos, reproductores Blu-ray o cualquier tipo de dispositivo multimedia externo, cuantas más mejor. Los modelos más básicos incluyen al menos dos.
Algunos accesorios imprescindibles
La disponibilidad de Skype, con el que es posible realizar videollamadas a través de la red, está presente en muchos modelos. Pero no incluyen de manera integrada el micrófono y la cámara necesarios para realizar las videollamadas en el propio televisor. Aunque es posible adquirirlos e instalarlos en todos los modelos que integran Skype. Si vas a utilizar a menudo esta funcionalidad, quizás te interese un modelo con los accesorios ya integrados.
Interactuar con las aplicaciones y manejar las nuevas funciones suele ser complicado con el mando a distancia tradicional, por eso es importante que el Smart TV cuente con algún método alternativo de control como, por ejemplo, un segundo mando a distancia, un teclado, el control gestual o por voz o la posibilidad de controlar el televisor desde una app instalada en el Smartphone.